Machu Picchu es el destino turístico por excelencia de Perú, que en 1983 fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO y en 2011 entró en la lista de las 7 Maravillas del Mundo Moderno. Pero, ¿cómo y cuándo se construyó la ciudad inca de Machupicchu?
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El complejo arqueológico de Machu Picchu es uno de los más conocidos a nivel mundial. Situado en la cima de un macizo conocido como el Batolítico de Vilcabamba (entre las montañas Machu Picchu y Huayna Picchu), a 2430 metros sobre el nivel del mar y a unos 80 kilómetros de la ciudad de Cusco, la antigua ciudad inca está considerada como una obra maestra tanto arquitectónica como de ingeniería. Su nombre procede del idioma quechua, donde la unión de ambas palabras significan “pico viejo” y recibió este nombre de una de las montañas más cercanas tras su “descubrimiento” en 1911. Además, el santuario está rodeado de leyendas e historias, lo que le confiere al lugar un cierto aire de misterio. ¿Sabes cuándo y cómo se construyó Machu Picchu? Te contamos todos los detalles a continuación.
¿Cuándo y cómo se construyó Machu Picchu?
Durante muchos años se tuvieron ciertas dudas respecto a cuándo y cómo se construyó esta ciudad, pero el análisis del carbono 14 reveló en 1987 cuál fue el origen de esta impresionante construcción.
Machu Picchu y la época inca
Los estudios arqueológicos han estimado que Machu Picchu se construyó durante el siglo XV. Pachacuteq, el primer emperador inca, tras conquistar la ciudad de Picchu, mandó construir en 1450 todo un complejo urbanístico de lujo para la aristocracia de la época inca. Junto al complejo urbanístico también se incluiría un mausoleo para albergar los restos del monarca Pachacuteq, aunque al final se utilizó también con carácter ceremonial. El lugar en el que se sitúa la ciudad inca, está elegida con tino, pues se encuentra rodeada de acantilados de gran envergadura y de una frondosa selva, lo que le permitía no ser vista por extraños. Además, la ciudad contaba con una única entrada, y por lo tanto no requería de muchos guerreros para protegerla.
En cuanto a los habitantes, se estima que habitaban en Machu Picchu entre 300 y 1000, todos pertenecientes a la descendencia del monarca inca. Por su parte, en el valle habitaban los sectores agrícolas y los centros administrativos, que aportaban alimentos para la población de Machu Picchu.
Tras la muerte del emperador inca, todo el complejo de Machu Picchu pasó a manos de su descendencia (lo que se conoce como panaca, una clase social especial), por lo que comenzó una nueva era gobernada por Túpac Yupanqui y tras este, Huayna Capac, hasta 1529.
¿Cómo se construyó Machu Picchu?
La ciudad inca de Machu Picchu es, sin duda, una verdadera obra de arquitectura e ingeniería. A pesar de contar con escasas herramientas, gracias a sus conocimientos, consiguieron crear cientos de terrazas que sujetaban las paredes de granito, un material especialmente duro. Gracias a su sistema de drenaje, estas paredes siguen sólidas mucho tiempo después de su construcción, lo que demuestra el ingenio de esta civilización. Pero, ¿por qué realizar esta obra en un lugar tan complicado?
Un análisis geoarqueológico de Rualdo Menegat, de la Universidad Federal de Río Grande do Sul (Brasil), ha determinado que los incas construyeron Machu Picchu sobre una red de fallas tectónicas de manera intencionada. La fractura predispuso a las rocas a romperse a lo largo de los planos, lo cual redujo la energía necesaria para tallarlas. Por otro lado, las fracturas predispusieron que se canalizara el agua del deshielo y de lluvia directamente al lugar en el que se encuentra. Esta localización evitaba también el riesgo de avalancha y sirvió como defensa ante la cultura chanca, que era guerrera.
Sin duda, pese a lo que hemos podido pensar durante tanto tiempo, la estrategia de los incas ha permitido su conservación durante los cinco siglos que lleva en pie. Un testamento de increíbles técnicas que ponen en relevancia el conocimiento avanzado de esta civilización.
El “redescubrimiento” de Machu Picchu
El “redescubrimiento” de la llamada “ciudad perdida” de Machu Picchu se le asignó al norteamericano Hiram Bingham, en 1911. Aunque se afirma que Machu Picchu nunca se “redescubrió”, porque los locales conocían de su existencia, esta es la historia más contada de cómo dio a conocer la importancia de este lugar.
El explorador y arqueólogo partió desde Cuzco con el objetivo de encontrar la ciudad Inca de Vilcabamba, que había sucumbido ante invasores españoles en 1572. Siguiendo el río Urubamba, llegó a una montaña en la que encontró las ruinas de granito blanco escondidas entre la vegetación. Pese a que en ese momento pensó que había dado con Vilcabamba, la ciudad inca situada entre dos montañas era realmente la ciudad que recibió el nombre de una de ellas: Machu Picchu.
Bingham quedó impresionado ante esta maravilla, por lo que consiguió iniciar un estudio científico apoyado por la Universidad de Yale, el National Geographic Society, además del apoyo del Gobierno Peruano, hasta 1915.
Machu Picchu en la actualidad
Tras la investigación de Hiram Bingham, dos fotógrafos peruanos, Martín Chambi y Juan Manuel Figueroa, publicaron varias imágenes de Machu Picchu, lo que hizo que creciera la curiosidad por este lugar. Es en 1981 cuando la ciudad inca se declara como “Santuario Histórico de Perú”. Posteriormente, en 1983, se une a la lista de “Patrimonio Cultural de la Humanidad” de la Unesco, y en 2007 se convierte en una de las “7 Maravillas del Mundo Moderno”.
La ciudad inca de Machu Picchu recibe un millón y medio de visitas de forma anual, pero gracias a su gestión y conservación, no es parte de la Lista de Patrimonio en Peligro que establece el organismo de la Unesco. Esto significa que podremos seguir disfrutando de esta maravilla durante muchos más siglos.
¿Has visitado ya la llamada “ciudad perdida”? ¡Cuéntanos qué te ha parecido en los comentarios!
Fuentes:
