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Llamada la cara amable de los Alpes, esta impresionante cadena de los Dolomitas es un paisaje lleno de naturaleza y tranquilidad perfecto para los amantes de las montañas, los prados y las regiones italianas.
Desde Ingeoexpert te contamos en el artículo de hoy qué son los Dolomitas y cómo se formaron, además de los sitios imprescindibles que no te puedes perder si te encuentras en esta zona montañosa.
Se trata de un conjunto de nueve sistemas montañosos extendidos entre dos países, Italia y Austria. El arquitecto, diseñador y pintor Le Corbusier dijo de los Dolomitas que eran “la obra arquitectónica más bonita del mundo”. Un lugar ideal para los amantes de la naturaleza, del deporte al aire libre y de las montañas. Conocidas también como las montañas pálidas, cabe destacar que es una cordillera extensa que abarca distintos picos, valles, lagos y montañas: Dolomitas de Brenta, Dolomitas de Sesto, macizo de la Marmolada, Croda da Lago, etc.
Uno de los lugares más famosos es el Dolomiti Superski, con un parque nacional, nueve parques nacionales y una zona de esquí, de las más grandes de Italia.
La razón es sencilla. El nombre de esta cadena montañosa se debe al geólogo francés Déodat Tancrêde de Dolomieu (1750-1801)-. El geólogo se encontraba de viaje en el Alto Adige cuando se dio cuenta de una roca caliza de magnesio, base de la roca dolomítica. Al estar compuesta por caliza de magnesio, dependiendo cómo dé la luz del sol, refleja diferentes tonalidades del color rosa que cambian al violeta antes de que caiga el crepúsculo. Por estos colores se conoce popularmente como los Alpes Rosados.
Como comentábamos al principio del artículo, la cadena montañesa se encuentra entre las regiones de Italia y Austria. En la parte italiana ocupa tres regiones (Trentino Alto Adige, Veneto y Friuli Venecia-Guilia) y se encuentra concretamente en las provincias de Bolzano, Trento, Pordenone, Belluno y Udine. Por su parte, en Austria se extiende por los Dolomitas de Lienz. La frontera entre ambos países es natural.
En 2009 se declaró al paisaje Patrimonio de la Humanidad. ¿Por qué? Se considera un zona bella con un parque nacional, reservas naturales y 116 picos que superan los 3.000 metros de altitud. Tanto la pista de esquí como las rutas de senderismo y de ciclismo y la escalada son un paraíso para todos.
A todo ello hay que sumar que a los pueblos que alrededor llega el transporte público de forma regular y que se ofrece una amplia red de albergues y refugios bien señalizados durante las rutas.
Su formación se remonta al Mioceno, perteneciente al período Neógeno. El paisaje se encuentra en continua evolución geomorfológica desde su origen. Las capas de roca se crearon por la acumulación de corales, algas y conchas que emergieron del mar donde se habían sedimentado y fueron transformándose durante años en montañas hasta llegar a la apariencia y tamaño de hoy en día.
La Marmolada es el punto más alto de la cordillera Dolomitas, ya que cuenta con 3.348 metros de altitud. En ella se incluyen los territorios que van desde Punto Penia a Punta Serauta. Si haces una parada en la estación de Serauta, podrás visitar el museo de la Gran Guerra, que exhibe objetos y documentales de la Primera Guerra Mundial.
Hay un funicular que lleva hasta la Punta Rocca en el verano y a las pistas de esquí en invierno.
Al estar formado por diversos valles que hace siglos estaban aislados entre sí, había culturas que eran muy particulares.
Por ejemplo, el Valle de Fassa es el único sitio donde los habitantes hablan la lengua ladín, una lengua retorromance surgida de la mezcla de lenguas de antiguos pobladores romanos y celtas. En la antigüedad se hablaba en la mayoría de los valles del Sudtirol, sin embargo, poco a poco fue perdiendo importancia. En el Valle de Fassa, tanto los nombres de los pueblos, los carteles y las indicaciones aparecen escritos en italiano y ladino.
En Dolomitas, concretamente en Valle de Fassa, se puede admirar la enrosadira, un efecto lumínico único que se produce en esta roca cuando cae el sol. La luz tiñe las montañas de tonalidades rosas y violetas creando una especie de magia en el paisaje. Sin duda los turistas que vayan tendrán la suerte de admirar este efecto natural lumínico. Pero no se trata de un efecto exclusivo de Dolomitas, sino de todas las montañas cuyas rocas sean de composición calcárea.
Se trata de Tre Cime di Lavaredo, una imagen icónica de las montañas. Se encuentran en la provincia de Belluno, Veneto. Se llama así porque los picos se elevan hacia el cielo como si fueran tres dedos levantados. Las cimas son: la Grande con 2.999 metros de altura, la Oeste con 29773 metros y la Pequeña o Piccola con 2857 metros.
Una de las rutas más populares comienza en el Refugio de Auronzo y rodea las cimas. Tiene un total de 10km con poco desnivel.
A continuación, te contamos cuáles son las ciudades y montes que no puedes perderte:
Cada región tiene sus productos típicos y aquí no iba a ser distinto. En esta zona se come muy bien, con restaurantes con estrella Michelín y alojamientos que ofrecen productos típicos de la zona. Hay tres alimentos que se producen en la región italiana:
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Fuentes: National Geographic, Conociendo Italia, Qué ver en el Mundo.
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