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Viaductos con aerogeneradores: innovación para producir electricidad

 

Podría tener aplicación en zonas masificadas por infraestructuras, así como en espacios protegidos donde es escasa la superficie útil para nuevas instalaciones.

La concienciación ambiental, otrora relegada a un papel secundario en el desarrollo global de nuestra sociedad, comienza a dar muestras de asentarse. Y, por lo que parece, está aquí para quedarse.

Así lo demuestra el reciente estudio Power output of a wind turbine installed in an already existing viaduct”, realizado por el investigador Óscar Soto y otros colegas de la Universidad de Kingston (Reino Unido). En este estudio, y tomando como referencia el viaducto del Barranco del Juncal, en Gran Canaria, se ha comprobado que el viento que sopla entre los pilares de este tipo de infraestructura es capaz de mover aerogeneradores y producir energía.

Basándose en el simulador Dinámica de Fluídos Computacional (CFD), las turbinas han sido representadas por discos porosos para valorar su resistencia al aire y probar distintas configuraciones. Así, estos discos son introducidos con el objeto de crear un bajada de presión, lo que se traduce en generación de energía. Este método, como se indica en el estudio, es una herramienta de contraste que ha sido ampliamente utilizada en una gran variedad de investigaciones y da una buena estimación del potencial de un aerogenerador en una zona concreta.

En el estudio se ha podido comprobar , como señala Soto, que la configuración de dos turbinas idénticas sería la más viable para incorporar a los viaductos, ya que “así se consigue un mayor equilibrio, tanto desde el punto de vista estructural como eléctrico, lo que influye en un menor coste económico”.

Por otro lado, como se desprende de los datos obtenidos en la investigación, cada viaducto presenta sus posibilidades energéticas y potencial eólico propios. En el caso de El Juncal, la potencia analizada estaría alrededor de los 0,25 MW por cada turbina. Al tratarse de dos turbinas, sumarían un total de 0,5 MW, lo cual les engloba dentro de la categoría de aerogeneradores de media potencia.

Según Soto, “esta potencia equivaldría al consumo medio de unas 450 ó 500 viviendas”, añadiendo que “una instalación de este tipo evitaría la emisión de unas 140 toneladas de CO2 al año, una cantidad que representa el efecto de depuración de unos 7200 árboles”.

La investigación, promovida por la empresa canaria ZECSA, y que ha contado con la colaboración de científicos de la Universidad de Vigo y de la Universidad de Las Palmas, ha sido publicada en la revista Renewable Sustainable Energy Reviews, y se enmarca dentro de la iniciativa PAINPER, un plan de aprovechamiento de infraestruturas para impulsar las energías renovables.

 

Este tipo de energía, que se podría sumar a la obtenida en las instalaciones eólicas, solares, geotérmicas y de biomasa, es un ejemplo palmario de que la investigación, el desarrollo y la innovación deben adoptar un papel dinamizador a la hora de maximizar recursos y de afianzar la ya asentada línea del desarrollo sostenible global.

 

Fuente: SINC

Ingeoexpert

Departamento de redacción de contenidos de Ingeoexpert

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